El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, ha anunciado que dimitirá mientras su partido enfrenta una intensa presión por una posible derrota en las próximas elecciones.
La renuncia de Trudeau, confirmada el lunes, se produce después de que las encuestas mostraran que su Partido Liberal fracasaría. El descontento de los votantes se debe a los altos precios y a la crisis inmobiliaria.
Las actividades políticas de Trudeau estuvieron marcadas por relaciones tensas con el presidente reelegido de Estados Unidos, Donald Trump. Las fricciones entre los dos líderes aumentaron a finales de 2016 cuando Trump amenazó con imponer aranceles más altos a los productos canadienses. Los intentos de Trudeau de resolver la situación mediante una reunión con él en Mar-a-Lago no dieron el fruto deseado.
En cuanto a los partidarios de Bitcoin y las criptomonedas, no pueden perdonarle que haya perseguido a los participantes del Freedom Convoy en 2022. Utilizando la Ley de Gestión de Emergencias, permitió al gobierno congelar las cuentas bancarias de los camioneros, suspender el seguro de sus vehículos y remolcar sus camiones. Todas estas medidas tenían como objetivo poner fin a bloqueos y protestas que el gobierno consideraba ilegales.
El descontento con su desempeño llegó a un punto crítico durante una reunión en diciembre con 50 miembros de su partido de Ontario, la provincia más poblada del país. Entonces muchos expresaron su desconfianza y exigieron su dimisión.
Después de la partida de Trudeau, muchos canadienses y partidarios de Bitcoin ven al líder del Partido Conservador, Pierre Poilievre, como un posible sucesor. Ha expresado abiertamente su apoyo a Bitcoin (BTC) y la tecnología blockchain y, por lo tanto, se le considera un fuerte contendiente.
Su ascenso al poder podría significar un cambio en el enfoque de Canadá hacia las monedas digitales hacia uno más amigable y favorable.